Te presentamos el testimonio de otro afectado por el ruido. En este caso del producido por el bar El Azabache, ubicado en Mezquitán Country, Guadalajara. ESTA ES LA OTRA CARA DE LA DIVERSIÓN. Los empresarios deben ser más empáticos con sus vecinos, ponerse en sus zapatos. No hacer a otros lo que no les gustaría que les hicieran a sus propias familias. Y las autoridades más enérgicas con los infractores. LUCHEMOS POR UNA CULTURA DE RESPETO Y LEGALIDAD.
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